Consejos para pasar las Navidades durante la Pandemia en Valencia

Llevamos muchos meses enfrentándonos a cambios que han afectado a casi todas las facetas de nuestra vida. En mayor o menor medida la situación actual esta presente en nuestro día a día de forma casi constante y las fechas que se acercan no se libran de ello. 

Vamos a tener que afrontar las navidades de una forma completamente diferente a lo que hemos conocido. La distancia social afectará a esos encuentros tan esperados que a veces son los únicos de todo el año. Muchas personas tendrán que hacerlo con la falta y afrontamiento de la pérdida de un ser querido como consecuencia de la pandemia. 

Tiempos de nostalgia: el piloto automático de la navidad

Te guste o no te guste la navidad, el problema va a ser como vamos a afrontar estas emociones en las fechas que queramos o no se acercan. Si tenemos una gran ilusión por ellas podemos experimentar mucha nostalgia y tristeza por los cambios que se han impuesto a raíz de lo vivido estos últimos meses y si no solemos disfrutarlas podemos enfrentarnos peor a ellas por el cansancio emocional con el que cargamos todos en mayor o menor medida por la pandemia. 

Estas fiestas siempre traen momentos intensos para la mayoría. Aunque no todas las personas las viven como algo que haya que celebrar, son unos días en los que las presiones sociales sobre cómo debemos o no debemos experimentar la navidad están presentes para todos. 

Es una época que evoca recuerdos de forma automática y que nos invita a acercarnos a ellos por la presencia y ausencia de factores o personas concretas. 

Para muchos, pese a las dificultades, esta época supondrá un pequeño respiro. Una bocanada de aire fresco entre tanta asfixia y malestar emocional, pero debemos de tener cuidado con ese piloto automático que podemos encender poniéndonos en riesgo. 

Si, la navidad supone tiempos de felicidad y reencuentros para muchas personas, pero también pueden aparecer sentimientos encontrados por todo lo que estamos viviendo, por no poder vivirla como nos gustaría o con quien nos gustaría. Todo ello podrá perjudicar a nuestra salud emocional y física.

Aún más se agrandan estas presiones si metemos la variable Covid-19. ¿Qué debo hacer? ¿Con quién tengo que pasarlas? ¿Es responsable lo que estoy haciendo?. Ansiedad, incertidumbre, carga emocional acumulada o bloqueo emocional son muchas de las sensaciones que pueden agrandarse en estas fechas. Debemos tener cuidado también con la falsa sensación de seguridad llevados por querer estar con los nuestros, como os comentamos en el artículo anterior sobre la fatiga pandémica.

Sentimientos encontrados en estas navidades

Si nos gusta, y podemos disfrutar de estas celebraciones, es posible que experimentemos sentimientos de culpa por nuestras emociones positivas en los tiempos que corren. Como si de repente estar felices y contentos se convirtiera en algo hipócrita o que valoramos como inmerecido. 

Estos sentimientos pueden agrandarse si nos falta un ser querido cerca o si hemos perdido a alguien como consecuencia de la pandemia. Podremos experimentar sentimientos encontrados entre ese pequeño respiro y la ausencia de personas queridas.

Aunque la distancia va a marcar la mayoría de encuentros este año, siguiendo las medida establecidas de seguridad y protección adecuadas, podemos acortar esas distancias con personas que estén lejos aprovechando las redes sociales. 

Consejos para pasar las navidades durante la pandemia

Es evidente que van a ser unas celebraciones distintas, no significa que no podamos disfrutar e intentar mejorar ese desánimo en estas fechas. 

Como hemos comentado en otros artículos, relacionados con la pandemia y la salud emocional, la incertidumbre puede ser muy molesta y más si nos acompaña en largos periodos de tiempo. No poder predecir y controlar qué va a pasar nos impide adaptarnos de forma adecuada pudiendo generar desesperanza, miedo y angustia. Emociones que llevan presentes en la vida de muchas personas desde que todo esto empezó. 

Vamos a intentar marcar una serie de pautas que pueden ayudarnos a poder disfrutar más en estas fechas, sin olvidarnos de la responsabilidad ni bajar la guardia. 

La norma de las cuatro AES:

Aceptación

Tenemos que hacernos a la idea y aceptar que esta navidad será diferente, que no se produzca de la misma manera. Saber asumirlo nos ayudará a dejar de lado esa nostalgia por lo que nos falta y centrar nuestras energías en buscar otras opciones que también la conviertan en algo especial. 

Si solo nos centramos en las cosas que no vamos a poder hacer y las limitaciones nuestra vivencia será completamente negativa. 

Pregúntate: ¿Qué hace de verdad que estas fechas tengan un sentido para mi o mi familia?
Es posible que para muchas personas la respuestas tengan nombres y apellidos, sea la compañía y pueda faltarnos alguién que había estado presente siempre.  

Los recuerdos pueden convertirse en un momento de homenaje y despedida, que igual además no hemos podido realizar de forma adecuada por la situación. 

Anticipación

Las cosas van a ser diferentes así que vamos a pensar cómo podemos paliar esas circunstancias para que las notemos lo menos posible. 

Organiza con tiempo con quién podrás reunirte o cómo podrás hacerlo, céntrate en las cosas que sí que sabes y que sí que están bajo tu control. 

Adaptación 

No solo a las nuevas circunstancias como tal, también a los recursos de los que disponemos aunque los medios sean diferentes. 

Las redes sociales pueden ser grandes aliados para estas fechas. Es posible que no podamos ver en persona a todos nuestros seres queridos, pero si podemos organizarnos para sacar un rato y pasarlo reunidos en el plano virtual con las personas que solíamos hacerlo. 

Normalmente las líneas telefónicas colapsan en momentos determinados de esta celebración, como el cambio de año. 

Organízate con tus familiares y amigos para que no se convierta solo en la típica felicitación navideña, al igual que nos solemos reunir en el plano físico concreta una hora y un momento para ellos, para que ese rato de verdad sea compartir y comunicar, no solo felicitar. 

Una de las cosas buenas que muchos y muchas hemos aprendido de esos meses de encierro, es que a veces la distancia física no significa obligatoriamente una falta de vínculo. 

Ayuda

Muchas personas no serán capaces de pasar estas navidades con un buen recuerdo. Puede que llevemos un tiempo ya con un estado emocional y/o físico malo y que ello nos impida poder disfrutar del día a día y de esta celebración. 

Existen muchos motivos para sentir algo de rechazo en estas fechas, sea algo que nos ocurre siempre o algo nuevo en nuestra vida. Como hemos comentado antes, podemos haber perdido a un ser querido (en pandemia o con anterioridad), podemos tener una mayor carga de trabajo, puede no gustarnos las tradiciones que envuelven a esta celebración….

No pasa nada, es completamente normal que podamos sentir rechazo, el problema es cuando nuestro humor no concuerda con esas presiones sociales que si de normal son elevadas, por la situación actual nos hemos volcado todavía más en ellas. 

No estamos obligados a meternos en la corriente de la felicidad que suele abrazar estas fiestas, no pasa nada si necesitamos que se conviertan en una pausa para sopesar todos los cambios a los que nos hemos expuesto. 

Es posible que con todas las emociones que despiertan estas vivencias, los reencuentros o la falta de ellos, caigamos en la cuenta del malestar que arrastramos. 

Puedes pedir ayuda. No solo porque en Navidad se diga que hay que estar más feliz o más contento, para muchas personas es solo una época más. 

La ayuda psicológica puede ayudarnos a dar un nuevo significado a todo lo que estamos experimentando, a mirar de otra forma esta situación, a cerrar ciclos y sobrellevar los duelos.